domingo, 10 de mayo de 2009

Tía

Ya seís años sin vos, y a pesar de esos años transcurridos, yo te sigo sintiendo conmigo, y con cada año que pasa me doy cuenta de lo bien que no estaríamos llevando ahora que soy, como alguna vez fuiste vos, una adolescente incomprendida que necesita una mano para caminar.

Pienso en los temas que podría hablar con vos, en las cosas comunes que tenemos -tendríamos- en común o al menos así imagino, pero sobre todo, pienso mucho en cuánto me formaste, en cuántas cosas me transmitiste y lograste que yo, hoy, valorara: los libros la música, el cine, el teatro; el arte en todas sus formas, la cultura, la educación y ni hablar de la política y de la historia...Lo que soy hoy, lo que me gusta hoy lo aprendí de vos y veo cuán consecuente fue tu vida acerca de lo que decías, sos la única persona que conocí -y sigo conociendo aun ahora que ya no estás físicamente conmigo- que siempre hizo lo que dijo y que trato de hacer la suya sin importarle el qué dirán...Y te admiro por eso y admiro la entereza con la que te moriste, la fortaleza que mostraste hasta el último minuto, cuando pediste que ya no te alimentaran, que ya no extendieran más la ardua agonía a la que el cáncer te sometió.

Me enseñaste tanto...Y me seguís enseñando, con las cosas que acá dejaste, con quiénes me dejaste y por cómo nos dejaste a todos. Yo sé que ayer, en aquella muestra tan importante para mí, vos estuviste conmigo, enorgulleciéndote y emocionándote a mi par.

1 comentario:

Fabiana dijo...

Que hermosos setimientos. Que orgullosa estaría de vos!


un beso preciosa!