martes, 31 de julio de 2007

Amistades


A lo largo de mi vida, fui plantando semillas que con el paso del tiempo y la dedicación que les brindé, se transformaron en preciosas flores que me dan afecto, contención, brazos y hombros que dan abrazos y me dejan depositar mis lágrimas.

La gente les dice amigos, pero para mí son mucho más que eso, son mi sostén, mi compañía, mi oxígeno, mis ganas de vivir, mi risa, mi alegría, y quienes acallan mi llanto. Los necesito para vivir, para que mi vida no sólo sea un acto de presencia ridículo, ellos hacen que todo valga la pena y llenan los espacios vacíos que dejaron algunos de mis familiares (ya tendrán su capítulo ellos).


No todas las semillas dieron flores, otras quedaron en el camino. Algunos siguen presentes, otros se quisieron ir, pero todos dejaron una importante marca en mi vida, me dejaron grandes enseñanzas, desde su amor o desde su indiferencia. Les agradezco a cada uno de ellos, y espero haberles dejado algo yo también.


En el último tiempo, me di cuenta que los verdaderos amigos se cuentan con los dedos de la mano y que no está mal que sean pocos, si es que uno se los ganó dignamente, sin pisar a nadie.

Me pasé los últimos meses preguntándome qué hice para que no me quieran, para que me ignoren, y llegué a la conclusión de que lo único que hice es ser diferente a ellos, quizá ser su contracara: ser una persona que se preocupa por los demás desinteresadamente, que se preocupa de corazón y con la simple intención de ayudar porque sé lo que es necesitar ayuda y no saber pedirla o no ser escuchado. Y reconozco, fui intolerante.

Es que estoy cansada de ciertas figuritas, de la falsedad y otras características mencionadas en la entrada anterior; les pido a ellos que no me sean tan demandantes, implícitamente me piden que sea tolerante, más simpática, pero no puedo ser tolerante y simpática con quienes me destrozan continuamente a mis espaldas, con quienes no son capaces de valorar mis buenas intenciones y mis virtudes viendo sólo mis defectos y malos actos.


Yo creo que hay que aceptar a la gente como es, y quererlos como tal. Por eso les agradezco hasta el hartazgo a mis VERDADEROS amigos, los que me acompañaron en la infancia y crianza, a los que me escuchan y contienen día tras día y a aquellos con los que me rio y disfruto a diario, no sólo una vez a la semana cuando los dejan solos los demás. G, MG, MA, A, ALE, S, N, M, TM, TC, E, gracias, los amo.


A los que abandonaron mi jardín en busca de otros más lindos o más tentadores, adiós, gracias por lo brindado, sus recuerdos seguirán intactos en mí, más allá de que sus últimos actos hallan empañado mi visión de ustedes, de su persona.

domingo, 29 de julio de 2007

Las 20 cosas que más me molestan

1) La hipocresía.
2) La mentira.
3) La traición.
4) Que se desentiendan de todo.
5) Que vallan por la vereda de lo fácil.
6) Que te menosprecien por pensar demasiado.
7) Que tilden de incorrectos los pensamientos diferentes.
8) Que se hagan los superados con giladas.
9) Que anden chismoseando por la vida.
10) Que vivan buscando el defecto ajeno para luego ridiculizar a esa persona.
11) Que se rían de los demás, sobre todo si se trata de una ideología personal.
12) Perder tiempo, me SACA.
13) El “maldito cuestionario” de las personas desconocidas que te agregan al Messenger con segundas intenciones “¿Cómo te llamás? ¿De dónde sos? ¿Edad? ¿Tenés novio” Fuck, no te conozco, chavón no pienso responderte.
14) Que te pongan cara de ojete y pretendan que vos les sonrías.
15) Que no sean capaces de darse cuenta de sus errores.
16) La soberbia me desquicia aunque yo lo sea.
17) El egocentrismo.
18) El egoísmo.
19) La poca memoria que tiene la sociedad.
20) Resignarse.


PD: Aún no logro poner vínculos :(

sábado, 28 de julio de 2007

Carta de presentación.

Me llamo Sofía y esos son los únicos datos personales que voy a dar por el momento, internet es una gran herramienta, pero a su vez es peligrosa si uno da muchos datos de sí mismo.

Opté por hacerme un blog pese a las miles y miles de veces que mi madre me lo ha prohibido, es que me da igual lo que ella diga, necesito hacerlo, quiero compartir mi ideología con alguien que no me conozca la cara ni mis actitudes frente a la vida y no pueda juzgarme por ello. Quiero que la gente me quiera por lo que pienso y por mis valores, por lo que soy hoy y no por lo que fui ayer.
Mi historia reciente marca que soy DEMASIADO sensible y que eso me trajo no sólo dolores de cabeza después de largas horas de llanto, sino que también a causado sendas heridas en mi corazón. Pero como muchos sabrán, las heridas nos fortalecen, y la experiencia nos previene, bueno...No en todos los casos.

Ahora voy a describirme un poco mediante la utilización de adjetivos aunque como siempre me pasa, seguramente vaya a explayarme, creo que eso les va a facilitar la lectura - si es que deciden leerme, claro - y también me va a aliviar un poco, después de todo ese es mi principal objetivo con esto.
Soy frontal, demasiado; soy poco cariñosa con amigas y con familia, excepto con los nenes, definitivamente ellos me pueden; soy sincera y aveces eso lastima a la gente que me rodea; soy seria, pero paso como amarga y superada a los ojos de mis compañeros; últimamente desconfío de la gente, me han decepcionado la cantidad de veces necesarias como para entender que debo tomar recaudos; soy enamoradiza, aunque lo llevo; soy insegura; independiente; quizá esté un poco "tocada"; peco de arrogante y poco modesta por momentos, pero trato de no mostrarlo, lo detesto en la gente y mucho más en mí misma; no soy para nada egoísta; me considero una buena amiga, cuando alguien me necesita trato de estar, y no soy de esas que pregunta por curiosidad, sino porque me nace, está en mi escencia; casi nunca dejo sin concluir las cosas, me gusta llevarlas al final, del modo que sea; me apasiona la lectura y la música, escucho todos los géneros.


PD: no soy muy hábil con temas referentes a la tecnología, pero suelo aprender rápido si me lo propongo.