viernes, 7 de diciembre de 2007

Huyo...Dejando todo como está.


Huyo de ustedes, de sus palabras, de sus reproches.
Siento que ya escuché demasiado y que ustedes no supieron escucharme a mí, entiendo que eso suceda, porque me cuesta exteriorizar mi grito interno, grito que se inició hace mucho y continúa emitiéndose sin importar quiénes puedan percibirlo.
Grito porque no me gusta lo que pasa a mi alrededor, grito porque al gritar combato la resignación que me acecha, grito porque ya no quiero soportar; quiero luchar, grito porque es mi manera de manifestar mi desacuerdo y desaprobación.

Ustedes no me escuchan y ya no sé si me importa, no me escuchan ni una palabra y si la escuchan la ignoran y no la comprenden, quizá ni siquiera les importe, y como me siento incomprendida, me encapricho y decido dejar de entender yo también. Después de todo siempre dije que creía en la justicia y pienso aplicarla en mi vida, obviamente a mis ojos es justicia, no a los suyos…Y creo que tampoco me importa en demasía…Como corresponde.

“Soy lo que soy y no tengo que dar excusas por eso”

Mi cabeza cada día opera más sencillamente, temo que las vacaciones me conviertan en un primate.
Bueno, tampoco la pavada.

2 comentarios:

Sebas dijo...

No te me vuelvas un monito por favor..., aunque pensandolo bien algunos son mas inteligentes que unos cuantos de nosotros...
Besote!!

markín dijo...

es tu vida... tu eliges ser feliz, o infeliz.

Todos, viven lo mismo que tú, pero desde diverso punto de vista. En enfermedades, en falencias económicas, estudios, etc...

Y todos, siguen adelante. Pese a todo.